viernes, agosto 08, 2008

Beijing 2008

La puesta en escena del espectáculo de apertura de los Juegos Olímpicos ha sido, según mi modesta opinión, uno de los más bonitos que he visto.
Visualmente muy, muy atractivo. Y el elevado número de actores en, sobretodo, la parte de los tambores donde cada uno estába milimétricamente situado junto al otro se me antojaba un precioso tapiz...

Pero incluso con todo el colorido empleado, danzas y demás parafernalia no consigo dejar de preguntarme cómo el resto del mundo ha permitido que China fuera elegida sede de los Juegos Olímpicos.

Quiero dejar claro que China, como país, me parece estupendo y muy interesante en todos los aspectos. Sin embargo, vulnera -por decirlo de manera cortés- los derechos humanos sin ningún reparo.
El conflicto con el Tíbet ha dado la vuelta al mundo... y el gobierno chino sale inmune al respecto. La ONU no puede hacer nada... tampoco puede presionar (ni ésta ni nadie) y exigir una libertad de derechos para los ciudadanos (incluyendo, me consta, a turistas y visitantes extranjeros) a quienes, por ejemplo, se les niega una información íntegra y sin restricciones. La censura campa a sus anchas en China.

Un país como éste, que además despunta como primera potencia, donde las grandes empresas están ampliando mercado (algunas trasladando sus sedes, pero esa es otra historia) debería recibir el castigo de cobrar un pago con la misma moneda.

Y sigo sin entender cómo, después de todo ésto, Pekín recibió el premio gordo de ser la sede de los Juegos Olímpicos 2008.
La única explicación que encuentro en todo este desorden es lo que se suele decir: "algo tiene que haber detrás" para haber movido los hilos de una forma tan poderosa.

1 Comments:

Blogger UniversoFF said...

Paris Dios las mejores olimpiadas sin duda china se lo ha currado increiblemente, es la Ostia sin duda alguna pero ha conseguido el mejor espectaculo de todos los tiempos

17:04  

Publicar un comentario

<< Home

Apoya Ecoogler.com el buscador ecológico