sábado, junio 11, 2005

Salutem Per Aqua

Lo mejor del día habrá sido, muy probablemente, ese baño SPA con el que me he homenajeado a mí misma, lleno de sales minerales del Mar Muerto, el más rico de la tierra ya que contiene cuarenta y tres tipos de oligoelementos diferentes.

Las aguas de este mar ejercen un beneficioso efecto extremadamente relajante sobre el sistema nervioso. Además, todas éstas propiedades penetran en la piel por ósmosis. Asimismo, la piel se encarga de dosificarla al organismo cuando hay alguna necesidad, haciendo las veces de reserva.

Tras la conversación de anoche, necesitaba una inmersión en cualquier producto (en su mayoría agua) que me consolara y me ayudase a ver, de manera más pausada, la nueva realidad que se me avecina a partir de hoy.

Temperatura del agua: 39ºC

Elijo, como telón de fondo, la música de Michael Nyman (Gatacca - BSO).

Suavizo la luz.

Me sumerjo desnuda, contigo en mi pensamiento. E intento borrarte definitivamente. (Horas más tarde me percato de que sigues aquí).

Mi bañera es más grande de lo que yo pensaba: incluso estirada, sobra espacio.

Ojos cerrados. Cabello recogido.

Movimientos circulares con las extremidades.

Sensación de bienestar: aromaterapia; talasoterapia.

Decido no permanecer más de quince minutos.

Ducha – masaje gradualmente más fría. Tonifico todos los músculos.

Salgo y me unjo con aceite de aloe vera que tiene propiedades calmantes y aporta una hidratación extra a la epidermis.

Cambio de música: Pájaros en la cabeza, lo nuevo de Amaral, y comienzo a ver el mundo bajo otra perspectiva...

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