lunes, noviembre 28, 2005

Miracle Drug

A pesar de que mi Días de Vino y Rosas existe gracias a él (hoy le sitúo en tercera persona porque de esta manera le confiero cierta importancia, cierto plano superior que pierde, sin lugar a dudas, cuando le tuteo y que, por supuesto, merece). Pues bien, hasta ahora no había hecho mención a tantas cosas que he de agradecerle.

Sólo con su insistencia consiguió que las Palabras, Líneas, Párrafos, Artículos, Fantasías diversas fluyeran a través de los pulsos de las yemas de mis dedos hacia ese espacio infinito como es Internet y me desperezase de la tangente timidez que confiscaba esta parte más literaria de mi expresión corporal, como llamo yo a este cuarto trastero donde organizo ciertas ideas que me impactan, temas de los que soy especialmente sensible, sueños que me obsesionan a ratos o la fascinación que siento por un par de elegidos.

Quiero dejar por escrito y reseñar sobretodo el apoyo logístico que él me ha ofrecido, indiscutiblemente, SIEMPRE. Sin su ayuda, tantas veces me habría encontrado perdida y mis asuntos urgentes se han visto solventados con rapidez cada vez que he precisado su asistencia.
Ahora que lo pienso, su disponibilidad está sujeta a un horario, muy riguroso en días laborables (8:00 - 22:00 horas) y algo más flexible en fines de semana. No se lo discuto. Sus razones tiene. Se acuesta algo más tarde que los Lunnis, teniendo en cuenta que éstos han adelantado su hora de emisión y que, simultáneamente, él ha retrasado su hora oficial de acostarse -que no de dormirse.
Bien es cierto que si en alguna ocasión no he respetado su agenda no ha sido por la necesidad que antes comentaba, sino por la adicción que siento por su voz y por el desarrollo de nuestras conversaciones. Interesantísimas todas.

*

23/11/05
  • Imperio Nuevo:
El esplendor de Egipto sin lugar a dudas y mi época favorita.

Por mi parte, además, me hallo en un proyecto que yo misma me marqué, un análisis personal, tras más de diez años de estudio, sobre las causas que llevaron al Faraón Amenhotep III a priorizar el culto a Atón y la conspiración de los sacerdotes de Amón contra la figura principal del Alto y Bajo Egipto por haber sido relegados a segundo plano. Tres generaciones y un traslado de la capital.
  • Más allá de las pirámides:
Un documental que, pienso, se aleja del típico tópico que relaciona Egipto con las Pirámides y muestra que hay MUCHO más que tres sepulcros colosales.
  • Lo que el viento se llevó (v. coleccionista):
Si tuviera que definir la palabra "soberbia", o más bien, si tuviera que añadirle un sinónimo, lo haría con las dos siguientes: Escarlata O'Hara.
Ni en la secuela de este clásico ni en ningún otro que jamás nadie ose a llevar al cine o a la televisión podrán en absoluto acercarse a la arrogancia, la vanidad y la insolencia que los ojos de esta actriz supieron trasmitir. Escenas como ésta en las que, acto seguido, se trasforma en un ser dulce e inocente o sexualmente seductora hasta rozar el escándalo sin parecer una poseída la hacen -a mi modo de ver- merecedora de un reconocimiento a nivel mundial.
La película es un clásico que debería ser "visita obligada" para quienes se denominen cinéfilos. Una obra maestra que se estrenó hace más de sesenta y cinco años, en 1939. Sólo escribirlo me produce un gran respeto y cierta sensación de grandeza.
  • U2 - Live from Chicago "How to dismantle an atomic bomb" tour:
De esta gira, me perdí el concierto que ofrecieron en Madrid, o en Barcelona, o en San Sebastián... cualquiera de las tres.
Bajo ningún concepto (ni siquiera para ver a esta banda que es, muy posiblemente, mi favorita) íba a pasar horas o quizá parte de la noche en una fila de la que surgió más de un "tortazo" con el fín de conseguir una entrada. Ya los vi en directo en la ciudad Condal en septiembre de 1997 y no pienso pegarme con nadie por esta banalidad. Hay que priorizar cuando hablamos de ostias.
El caso es que se me quedó la "espinita clavada" y hace menos de una semana que ha salido a la venta el DVD que acabo de mencionar y que ahora obra en mi poder...


Con esta selección de títulos de lujo que él tuvo a bien de hacerme llegar consiguió alegrarme el día. Y los siguientes también.
Termino con el temor de parecer materialista pero quiero explicar que en absoluto es así. Tal y como comienzo este párrafo, denomino estos cuatro títulos como una selección de cinco estrellas que tan sólo alguien que me conozca en profundidad se atrevería a regalar. Y me encanta que haya sido él por todo lo que implica.

Y sigo pensando que se excedió con el envío... Que no tiene remedio porque a veces se deja llevar por impulsos a los que prefiere obedecer en lugar de escuchar a su propia razón. De cualquier manera, por lo que significan para mí estos títulos y sin obviar ninguna de las razones anteriores, necesito darle las gracias abiertamente si es que a este post se le pudiera catalogar como público, que en cierto modo lo es aunque no lo visite nadie porque así es mi deseo.

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